Gorgonzola es un famoso queso italiano, conocido en todo el mundo. Genial por sí solo, también se presta a la creación de muchos otros platos, salsas y rellenos cremosos. Gorgonzola se puede dejar mucho tiempo en el frigorífico ya que adquirirá un sabor más fuerte y mejorado.

Para los ravioles de gorgonzola y nueces puedes utilizar gorgonzola picante o dulce, según prefieras un sabor más suave o más picante; y, al mezclarlo todo, para que quede más cremoso puedes añadir 2-3 cucharadas de mascarpone o ricotta. Por último, cocina los raviolis en abundante agua hirviendo con sal durante unos minutos, en cuanto suban a la superficie están listos; luego escúrrelos bien, teniendo cuidado de no romperlos.