Para hacerlos aún más sabrosos y suaves, puedes agregar hojuelas de mantequilla a cada capa de pasta en la lasaña. En lugar de comprar la salsa bechamel preparada en el supermercado, puedes prepararla en casa con esta sencilla receta: simplemente derrite 100 g de mantequilla en una cacerola pequeña y luego agrega 100 g de harina tamizada, creando un 'roux'. Cocine por unos minutos y luego retire la sartén del fuego, agregue 1 litro de leche tibia, una pizca de nuez moscada y sal.