No llene demasiado las galletas con mermelada y selle bien los bordes para evitar derrames desagradables. Si te gusta el efecto visual, puedes sellar los bordes con las puntas de un tenedor o simplemente con los dedos. Además, no ajuste la temperatura del horno demasiado alta: las galletas son pequeñas y la masa es delgada, ¡lo que hace que se quemen fácilmente! Además, preste atención al tiempo de cocción que puede variar de un horno a otro: en la receta sugerimos 30 minutos, pero menos puede ser suficiente.

Las galletas fueron inventadas por los ingleses, que buscaban un pan que pudiera soportar largas travesías por mar y así alimentar a los marineros durante la travesía, sin moho ni desprendimiento de ningún tipo. La idea era hacer un pan plano y seco y cocinarlo dos veces, de ahí el nombre "bi-cuit", "dos veces cocinado". Más tarde, un panadero tuvo la idea de tomar este pan y agregarle mantequilla y azúcar. El hecho estaba hecho: nacieron las galletas.