El cerdo es un animal del que no se tira nada, según la tradición campesina: de hecho, desde la carne hasta el pelaje, es posible reciclar cada una de sus partes para obtener algo sabroso o, alternativamente, útil en la vida cotidiana. En el caso del solomillo de cerdo, que es una de las partes más nobles de este animal, hay que decir que la carne en sí se caracteriza por su notable ligereza, siendo muy baja en grasas, pero con un altísimo aporte de nutrientes. En comparación con otros tipos de filete, el filete de cerdo también cuesta bastante menos.
Uso en cocina
Por sus particulares propiedades nutricionales, el filete de cerdo es apto para su uso en la preparación de platos nutritivos pero magros, como carnes cortadas o asados.
Conservación
El filete de cerdo se puede conservar de forma segura en el frigorífico durante un par de días o, alternativamente, se puede congelar hasta por tres meses.
Curiosidad
Aunque se trata de carne de cerdo, que en el imaginario colectivo es sinónimo de grasa, el filete de cerdo es una carne muy magra e igualmente nutritiva.