Las clementinas son cítricos también conocidos con el nombre de mandarinas, ya que son el resultado de la unión híbrida entre mandarinas y naranjas: las clementinas más famosas son originarias de Apulia, particularmente de la zona de Taranto, y alternativamente también se encuentran en Calabria. El origen de las clementinas se encuentra nada menos que en el país africano de Argelia, donde, hacia 1940, Clément Rodier llevó a cabo accidentalmente un experimento de hibridación entre dos tipos diferentes de cítricos. Según otros, sin embargo, el origen de las clementinas se encuentra en países asiáticos como China o, en segundo lugar, Japón.
Uso en cocina
Las clementinas saladas se pueden utilizar principalmente como ingrediente para acompañar platos a base de aceitunas y guindillas, o incluso guisos.
Conservación
Para evitar que las clementinas saladas se echen a perder, lo mejor es guardar el tarro en un ambiente fresco, oscuro y seco.
Curiosidad
Las variedades de clementinas más buscadas y apreciadas a nivel nacional son sin duda las originarias de Calabria y Taranto.