Los arándanos son bayas conocidas desde la Antigua Grecia, en particular por Dioscórides, quien ya durante el siglo I d.C. los utilizaba para tratar algunos trastornos intestinales, en particular la disentería, y luego volvieron a estar de moda. durante la Edad Media para tratar trastornos de salud como la descongestión. Para disfrutarlos de la mejor manera, los arándanos deben estar muy firmes y, en general, deben estar libres de marcas de colores oscuros o magulladuras. Los arándanos también son ideales para preparar mermeladas, así como para dar un sabor más agradable a helados, muffins o, alternativamente, también para adornar tartas de forma elegante y sofisticada.
Uso en cocina
Los arándanos se pueden utilizar principalmente para preparar postres delicados, aunque también se utilizan mucho para preparar primeros y segundos platos inusuales.
Conservación
Si están recién cosechados, los arándanos se pueden conservar en el frigorífico durante un par de días: para conservarlos por más tiempo, es necesario congelarlos.
Curiosidad
Antiguamente los arándanos se utilizaban para obtener tinta y una especie de preparado para teñir tejidos.